Es cerrando los ojos, que estás.
Afables, esperando, dominados por un magnetismo, nuestros labios.
Nuestras narices se rozan y se siente en el estómago. Se me cortó el aire, le dio hipo al corazón.
Se me hace agua la boca, de usar la imaginación.
La rosada redondez, de tu fábrica de besos,
la fuerza con la que abrazaría tus huesos,
la dicha de mis dedos surfeando en tu cabeza terciopelo.
26 julio de 2009
Afables, esperando, dominados por un magnetismo, nuestros labios.
Nuestras narices se rozan y se siente en el estómago. Se me cortó el aire, le dio hipo al corazón.
Se me hace agua la boca, de usar la imaginación.
La rosada redondez, de tu fábrica de besos,
la fuerza con la que abrazaría tus huesos,
la dicha de mis dedos surfeando en tu cabeza terciopelo.
26 julio de 2009